jueves, 2 de octubre de 2008

El Parque Nacional Nahuel Huapi

Cuidad : Santa Cruz




Glaciar Perito Moreno :

El Perito Moreno es uno de los tantos glaciares que forman el Parque Nacional Los Glaciares. Todos forman el Hielo Continental Patagónico (17.000 kilómetros de extensión), una de las reservas de agua potable más importante del mundo. Es que el 90 % del agua dulce del planeta se encuentra en las zonas glaciarias: después de la Antártida y Groenlandia, sigue nuestra región.

Relieve :

Rodeado de cumbres nevadas y bosques de lengas y ñires, estos hielos cubren unos 195 km2 (según otras fuentes 235), es decir, más de la superficie de la Capital Federal, de la que se encuentra a una gran distancia: 2.800 km.

Clima :

El clima es seco y las grandes variaciones térmicas estacionarias no impiden disfrutar de las distintas opciones de paseos. Las aguas del Lago Argentino ayudan a elevar la temperatura media, mientras las suaves laderas ubicadas al sur funcionan como una protección natural, como resultado se obtiene un clima más benigno que el de las mesetas circundantes. De modo que, durante el invierno, los días transcurren con cielos claros y despejados, máximas de hasta 12°C y mínimas bajo cero, mientras que en verano la media máxima supera los 18ºC.

Fauna y Flora :


Miles de años atrás, gran parte del parque nacional estuvo cubierto por glaciares. En su avance, estos ríos de hielo erosionaron y dieron forma al paisaje, excavando en la montaña amplios valles de laderas abruptas. Al mismo tiempo, como gigantescas topadoras, fueron fragmentando y arrastrando gran cantidad de rocas, que se acumularon en el frente y en los flancos del glaciar, formando montículos denominados morrenas. Pero un posterior cambio climático, que incluía un aumento en la temperatura, causó la reducción de la superficie ocupada por el hielo, hasta alcanzar su estado actual. En ella la vegetación está compuesta por plantas adaptadas a condiciones de escasa humedad y fuertes vientos. Los arbustos pequeños y espinosos, junto con los pastos de hojas duras, proveen cierta protección al suelo evitando que este se erosione. También sirven de alimento para el guanaco y el choique. La disminución de las precipitaciones hacia el este del área, genera un cambio en el paisaje. Se desarrolla allí una zona de transición (ecotono) en la que se encuentran especies típicas del bosque conviviendo con otras características de la estepa. Así, grupos de ñires y lengas se intercalan entre matorrales de calafate y notro con zonas abiertas cubiertas por pastizales en los que domina el coirón. En las alturas, por sobre los 1100 m.s.n.m., los fuertes vientos, las bajas temperaturas y las nevadas no favorecen el crecimiento de los vegetales. Las pocas y pequeñas plantas, que cubren escasamente el suelo, se encuentran adaptadas para cumplir su ciclo de vida en el corto período en que las condiciones climáticas lo permiten










Cuidad: Bariloche











Parque Nacional Nahuel Huapi:


Fue la primer área protegida del país, creada en el año 1934. Comprende 705.000 hectáreas que forman parte del entorno natural del sudoeste de la provincia de Neuquén y del noroeste de la provincia de Río Negro. Representa, con su riqueza ecológica y paisajística, toda la región andina del norte patagónico, preservando el bosque y la estepa de la Patagonia y los altos Andes. El paisaje que forman los lagos escondidos entre los bosques supera las mejores pinturas impresionistas. Un inobjetable primer lugar ocupa el lago Nahuel Huapi, con 560 kilómetros cuadrados y 454 metros de profundidad, el doble de extensión que la ciudad de Buenos Aires. En el centro emergen la isla Victoria, de 31 kilómetros cuadrados, y otras islas menores, como Fray Menéndez, Huemul y el islote Centinela. Lejos, le siguen lagos como el Traful, Gutiérrez, Mascardi y Guillelmo, además de las lagunas Negra, Schmoll, Touchek, Frías y Jacob que, junto a otros cauces, desaguan en el Atlántico o el Pacífico.



Fauna :



Los cipreses de las guaitecas, los maniú macho y hembra, laurel, alerce y el fuinque son algunas de sus especies nativas. En la densa vegetación difícilmente se dejan ver el pudú, el gato huiña y el monito del monte, pero sí se pueden observar anfibios y aves como el carpintero negro, el chucao, el rayadito y la cotorra austral.En algunas islas del Nahuel Huapi vive el cormorán imperial, curioso hábitat para un ave preferentemente marina. Una especie típica de esta área protegida es el huillín, una nutria nativa que puebla las costas de los lagos, lagunas, ríos y arroyos. El tuco-tuco colonial es un roedor que también vive en este ambiente, construyendo madrigueras subterráneas. Son comunes las gaviotas cocineras que siguen a las embarcaciones.En plena estepa patagónica, los pastos de tonos amarillos y anaranjados albergan a zorros, pumas y guanacos, junto a aves rapaces como el gavilán ceniciento y el halconcito colorado, entre otros ejemplares característicos.



Flora :



Al alejarse de los lagos, hacia el este de los bosques andino-patagónicos, se extiende un área de transición con la estepa patagónica que se distingue por un bosque abierto de cipreses, radales, ñires y maitenes. Presenta una mayor variedad de fauna porque conviven ejemplares propios del bosque con los característicos de los pastizales esteparios. El ciprés cubre las laderas rocosas de Valle Encantado, uno de los rincones más exquisitos del parque.En la misma orientación, empiezan a disminuir las precipitaciones, marcando una zona de cañadones y mesetas semiáridas.



Relieve :



Cerros como Santa Elena, Bastión, López y Catedral, cuyas alturas varían entre los 1.800 y 2.400 metros, marcan profundos valles y quebradas, donde se encuentran los conocidos pasos Puyehue, Pérez Rosales y el de los Vuriloches, muy utilizado por los indígenas. Hacia el este, en la zona preandina, se alzan los cerros Otto, Ventana y el cordón del Ñirihuau, que ofrecen espectaculares vistas panorámicas desde sus cimas. La naturaleza altoandina crece sobre los 1.600 metros sobre el nivel del mar, con una vegetación rala de pequeñas hierbas adaptadas a la rigurosidad del clima. En esta región anida el cóndor y, durante el verano, se refugia el huemul. La nieve que se acumula en invierno permite mantener los últimos glaciares y una delicada red de arroyos, ríos, lagos y lagunas.Los bosques cubren las partes bajas de las montañas y los valles. Lengas, coihues y ñires florecen en primavera creando uno de los paisajes silvestres más coloridos. Las flores rojas del notro, la trepadora mutisia, de vibrante color naranja, los tonos lilas de la virreina y el amarillo vibrante del amancay tapizan el sotobosque.